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Los ganadores se dieron a conocer el 30 de octubre en el Millennium House Community Centre de Seddon, donde se expusieron al público los 22 mejores trabajos.
Las 22 obras seleccionadas se redujeron a 10 finalistas, una finalista y una ganadora, y se juzgaron por el modo en que cuestionaban los estereotipos negativos sobre el envejecimiento, retrataban el envejecimiento positivo, mostraban la belleza y las diversas capacidades de las personas mayores, y si el título y la descripción de la obra coincidían con su mensaje.
La artista autodidacta Richa Panicker, de Sídney, se llevó el primer premio, dotado con 1.500 dólares, por su obra "Joie de vivre", descrita como un "testimonio de la intemporalidad del espíritu humano".
La artista de Tasmania Daria Andrews recibió el accésit de 1.000 dólares por su obra "Rayas y arrugas", que representa a su marido ayudando a su madre a bañarse, una escena que la artista describió como "profundamente conmovedora".
Los otros 10 finalistas recibieron 250 dólares cada uno.