¿Un nuevo fenómeno o sólo un nuevo nombre? La alienación de los abuelos es una situación en la que a los abuelos, por diversas razones, no se les permite tener lo que la sociedad llamaría una relación "normal" con sus nietos. En otras palabras, están alejados de sus nietos.
Se puede argumentar que "siempre ha sido así", que siempre ha habido casos de abuelos a los que se les negaba el acceso a sus nietos. Sin embargo, el hecho de que ahora exista un término para esta ruptura de relaciones indica que es más común en la sociedad actual. Pero, ¿es una forma de maltrato a las personas mayores?
La Organización Mundial de la Salud define el maltrato de las personas mayores como "un acto único o repetido, o la falta de una acción apropiada, que ocurre dentro de cualquier relación en la que existe una expectativa de confianza, y que causa daño o angustia a una persona mayor".
Desgraciadamente, hay muchas situaciones en las que puede producirse la alienación de los abuelos y causar daño y angustia.
Por ejemplo, tras el fallecimiento de su hijo mayor de edad, su pareja prefiere, o necesita, que sus propios padres le ayuden en la crianza de los hijos, rechazando lo que puede considerar una "injerencia" de su antigua familia política.
O cuando tu hijo adulto y su pareja se divorcian, una situación que puede ser aún más volátil si es la ex pareja con quien viven los nietos.
En el día a día, sin muerte ni divorcio de por medio, puede ser tan sencillo como que la pareja de su hijo adulto no le haga partícipe de la educación de su nieto o prefiera que participen sus propios padres.
Esto puede manifestarse en algo tan sencillo como no invitarle a los acontecimientos especiales de su nieto, como cumpleaños, primer día de colegio, graduación, etc.
Los abuelos que se encuentran en esta situación disponen de apoyo. El simple hecho de saber que no están solos puede ayudarles.