Foto de unas manos agarrando una rodilla en primer plano

Huesos y músculos fuertes, imprescindibles ante una sanidad que envejece

La artritis, la osteoporosis y la debilidad muscular a veces se descartan o se malinterpretan debido a los estereotipos sobre el envejecimiento.

Publicado: 6 de diciembre de 2024
  • nacional
  • 6 de diciembre de 2024
  • Salud musculoesquelética Australia (MUSCHA)

A medida que envejece nuestra población, resulta más urgente que nunca garantizar una asistencia sanitaria integradora, eficaz y adaptada a las necesidades de los adultos mayores.

La salud musculoesquelética es un ámbito en el que la discriminación por motivos de edad puede afectar negativamente a la atención y los resultados.

Afecciones comunes como la artritis, la osteoporosis y la debilidad muscular son frecuentes entre los adultos mayores, pero a veces se desestiman o malinterpretan debido a los estereotipos sobre el envejecimiento.

Al reconocer estos retos y capacitar a las personas mayores para que participen activamente en su atención sanitaria, podemos crear un sistema que favorezca la salud musculoesquelética de todos.

La discriminación por motivos de edad en la asistencia sanitaria se refiere a los prejuicios o la discriminación que pueden sufrir los adultos mayores y que conducen a una asistencia sanitaria de baja calidad o a la invalidación de verdaderos problemas de salud. En el caso de los problemas musculoesqueléticos, los profesionales sanitarios pueden restar importancia a síntomas como el dolor o la rigidez articular, calificándolos de "signos normales del envejecimiento", en lugar de identificar enfermedades tratables como la artritis o la osteoporosis. Lamentablemente, esta perspectiva discriminatoria a veces se traduce en una disminución de la calidad de vida de muchas personas mayores.

Aunque hay muchos profesionales sanitarios que no permiten que el edadismo influya en su práctica, por desgracia no siempre es así.

Capacitar a las personas mayores para que estén bien informadas y participen en sus decisiones sanitarias, aumentar sus conocimientos sobre salud y tomar decisiones en consulta con su equipo sanitario son algunos de los pasos clave para superar las barreras que plantea la discriminación por motivos de edad.