Introducción
Todo el mundo merece un lugar seguro al que llamar hogar. Ahora que cada vez más australianos mayores alquilan, y a veces de forma inesperada, es más importante que nunca conocer las leyes que protegen a los inquilinos y los cambios que se están introduciendo para reforzarlas.
Es significativo que el alquiler no sea sólo una fase de la juventud: muchas personas están dispuestas a alquilar de por vida. Algunos se convierten en inquilinos por necesidad, no por elección, y entre ellos hay personas mayores. Ya sea por el endurecimiento del mercado inmobiliario o por las complicaciones de una ruptura sentimental, cada vez son más las personas de mediana o avanzada edad que se encuentran alquilando, algunas por primera vez.
Retos para los inquilinos de más edad
Alquilar a una edad avanzada puede asociarse al riesgo de pobreza y a efectos adversos sobre la salud y el bienestar, según el Instituto Australiano de Salud y Bienestar (AIHW). Si eres un inquilino mayor, conocer tus derechos y la ley puede ayudarte a salvaguardar tu seguridad.
Una revisión de los datos del Censo de 2021-2026 mostró que el número de australianos mayores en alquileres privados está creciendo.1 En 2021, el 11% de las personas de 55 años o más (cerca de 700.000 personas) alquilaron una vivienda a un propietario privado. En comparación, esa cifra en 2011 era del 8% (cerca de 296.000 personas). Las estadísticas muestran que son más las mujeres mayores que alquilan que los hombres mayores.
Una de las razones de este aumento podría ser que las rupturas de pareja suelen implicar la división de bienes, lo que deja cierta seguridad financiera, pero no la suficiente para volver a comprar en un mercado inmobiliario sobrecalentado. Otra es que el mercado actual de alquileres privados en Australia es extremadamente estrecho.
La crisis del alquiler y las personas mayores
El mercado privado de alquiler puede ser muy duro para los inquilinos, especialmente para los que tienen rentas bajas o son vulnerables. Desde hace unos años, la tasa de desocupación es inferior al 1,5% en todo el país. Un mercado de alquiler sano y equilibrado, con suficientes viviendas vacías para satisfacer a propietarios e inquilinos, rondaría entre el 3 y el 5%.
En pocas palabras, no hay suficientes viviendas de alquiler vacías para todos los que las necesitan. Y a medida que aumentan los alquileres y los desahucios, se dispara la demanda de viviendas sociales (públicas o comunitarias) suministradas por los gobiernos y los servicios de apoyo a la tenencia.
Todos hemos visto y oído historias en los medios de comunicación sobre la crisis del alquiler. En todo el país, son habituales las imágenes y los reportajes de gente haciendo cola para inspeccionar propiedades o, peor aún, viviendo en coches o haciendo couchsurfing.
El número de personas mayores que viven en hogares con bajos ingresos en alquileres privados casi se duplicó en la década hasta 2021. Si estas personas fueran desahuciadas o se vieran incapaces de pagar alquileres más altos, es posible que no pudieran encontrar otro lugar donde vivir.
Además, según la AIHW, las personas mayores que alquilan tienen más probabilidades de cambiar de casa que las que son propietarias.2 Y cada mudanza conlleva el estrés y los gastos de encontrar un nuevo lugar donde vivir.
Mayor protección jurídica de los inquilinos
La crisis del alquiler ha hecho que aumenten las peticiones de mayor protección para los inquilinos. Los gobiernos estatales son los responsables de elaborar y aplicar las leyes y normativas sobre alquiler. Nueva Gales del Sur, por ejemplo, está a punto de prohibir los desahucios "sin culpa" o "sin motivos", sumándose así al ACT, Victoria, Queensland y Australia Meridional.
Con la legislación actual, un inquilino puede ser desahuciado aunque haya pagado el alquiler puntualmente, haya cuidado la vivienda y el propietario tenga intención de seguir alquilándola. La supresión de los desahucios "sin motivo" dará más seguridad a los inquilinos e introducirá un equilibrio.
Esta importante reforma debería dar confianza a los inquilinos para que hagan uso de sus demás derechos, por ejemplo, a que se lleven a cabo las reparaciones.
¿Dónde pueden obtener ayuda los inquilinos mayores?
Conocer tus derechos como inquilino mayor puede ser el primer paso para saber cómo afrontar una experiencia de alquiler difícil. Si te mantienes informado y buscas la ayuda disponible, podrás cuidarte mejor y mantener la seguridad de tu vivienda.
El gobierno de cada estado o territorio tiene una página web en la que informa a propietarios e inquilinos sobre las distintas leyes de alquiler. Suelen estar dentro de páginas web gubernamentales sobre comercio justo o protección del consumidor.
Cada jurisdicción cuenta también con una red o servicios especializados de apoyo al arrendamiento para ayudar a los inquilinos, especialmente a los que están pasando por un proceso difícil como el desahucio real o la amenaza de desahucio. Consulte a continuación los enlaces correspondientes a su estado o territorio. Aunque estos servicios pueden estar muy saturados, suelen ofrecer consejos y sugerencias muy útiles en sus sitios web.
Si te preocupa la seguridad de tu situación de alquiler, busca ayuda. Habla con un amigo o familiar que pueda apoyarte y ponte en contacto con el servicio de ayuda al alquiler. Algunas residencias de ancianos, organizaciones benéficas y comunidades espirituales disponen de servicios que pueden ayudar a las personas mayores a resolver problemas de alquiler o a conocer sus derechos legales.
Si su situación es desesperada y actualmente no tiene hogar o podría quedarse sin él en breve, no espere. AskIzzy puede ayudarte a encontrar alojamiento de emergencia o para situaciones de crisis en tu zona. Ask Izzy es un sitio web que sirve para poner en contacto a personas necesitadas con ayuda, desde comidas hasta asesoramiento.
Recursos
Información sobre los requisitos de acceso a la ayuda al alquiler de la Commonwealth:
Territorio de la Capital Australiana:
Nueva Gales del Sur:
Territorio del Norte:
Queensland:
Tasmania:
Australia Meridional:
Victoria:
Australia Occidental:
por Cathy Callaghan
Cathy es una defensora de políticas de vivienda mejores y más justas, con sede en Nueva Gales del Sur.
Referencias
[1] Stone, W et al. (2023). Ageing in a housing crisis: older people's housing insecurity and homelessness in Australia. Universidad Tecnológica de Swinburne. DOI
[2] Instituto Australiano de Salud y Bienestar (AIHW) (2024). Older Australians: housing and living arrangements. Informe web.
Todos los comentarios son moderados. Consulte nuestras condiciones de uso para saber cómo participar en nuestra comunidad.